"El primer beso apasionado y el inicio del deseo…”

Hola soy yo, estoy riendo sucede cada vez que recuerdo mi niñez, absurdo quizás pero curioso también recuerdo la música de mi niñez, tan lindas, bueno sigamos con el relato.
Apoyo su cuerpo al mió, me apretaba, sus manos, ya no estaban en mis pecho ahora se trasladaron a mis piernas y de un tirón intento bajarme las bragas, dije intento porque un certero golpe de Lola lo retuvo, fue gracioso Tania, no te preocupes no paso nada fue Lola al rescate, yo al darme cuenta de la interrupción me reí, y arreglando mis ropas entre a la casa, pero pude ver como él se rascaba la cabeza y a tientas se iba hacia su casa. En mi habitación, Lola me miraba con reproche se sentó a mi lado y me hablo, con esa voz seria intentando captar mi atención. -Pequeña eso que ibas a hacer – me dijo Lola- no esta bien, aun eres una niña, solo tienes 15 años…- -Ya cumplo 16- le grite molesta -además él me gusta, que tiene de malo, yo lo quiero- ella suspiro hondo, diciendo -Mañana hablaremos con más calma, ahora debes dormir, felizmente su mamá no regresa y que su padre se encuentra de viaje- dijo formalmente Lola suspirando y se fue. Ahora Tania en mi habitación a solas recuerdo las caricias de Ángel, si ese es el nombre de mi gran amor, sus caricias me habían llenado de un calor extraño, algo que nunca había experimentado y al recordarlo sonreía cautivada, me emocionaba cada vez, que recuerdo a Ángel creo que dormiré soñando con él. Al otro día querida Tania, cuando mi mamá se fue a la oficina, Lola se sentó conmigo en la mesa y mirándome seria dijo -Las mujeres debemos proteger lo más sagrado que tenemos en la vida, eso es nuestro cuerpo- ¿Nuestro cuerpo? pregunte intrigada, que pasa si nos tocan, ella con una calma no muy propia en ella me trajo un libro donde decía “Educación sexual” me lo dejo en la mesa para que yo lo viera, lo leí pero no entendía casi nada, mejor me lo hubiera explicado ella, pero como te digo Tania, Lola es rara, además que hacía ella con ese libro a sus 25 años. Estoy triste Tania ya han pasado varios días y Ángel no aparece, me extraña que él no me llame, me siento triste, se que tiene miedo que mamá se entere, de que tengo novio, pero ya se acerca mi cumpleaños, yo quiero que el venga, mamá dice que me llevara de paseo a la playa de mi tío, ¡no quiero ir!, no quiero ir, allí esta el pesado de Tonny, te acuerdas de él verdad, se cree mucho solo porque sabe surfear, no me agrada. Así que decidí ir buscarlo, para poder hacerlo planee todo yo sola, me tuve que escapar del colegio eso fue divertido, solo le dije a la encargada que me vino el periodo, y tenia que regresar a casa, porque tenia cólico la encargada accedió, después de todo el libro de Lola si sirvió. Tome un taxi lo espere en la entrada de su escuela a que saliera cuando él me vio, se alejo apurado, corrí hacia él, pero él me decía sin mirarme -¡vete! tu sirvienta me dijo que no querías verme, después de lo que intente hacerte el otro día ella dijo: “si vuelves a esta casa te denuncio por violador”. -Violación- repetí yo, acaso eso es lo que pretendió hacer Ángel el otro día, pero yo sabia que violación es cuando se hace algo en contra de tu voluntad pero ese día yo estaba más que dispuesta a hacerlo. Me molesto que Lola se entrometa en mi vida. Como te cuento Tania él se detuvo, yo lo abrace por detrás él sonriendo giro su cuerpo y también me abrazo al tenerme en frente suyo dijo -Cada vez te ves más alta eres de mi estatura- Si dije riendo es que tomo mucha leche, --¡leche! repitió él riendo de forma extraña, no se porque se reía me pareció algo tonto pero también reí con él para no parecer tonta. Nos fuimos al parque no me importo la hora ya empezaba a oscurecer estábamos los dos abrazados apoyados a un árbol entonces le dije: -¡quiero que vengas a mi fiesta!-

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